El Gobernador del estado de México, Alfredo del Mazo Maza, también recorrió el municipio de Tenancingo para conocer los daños que produjo el sismo del pasado martes.
Aseguró que lo más importante en este momento es conocer cuantas casas sufrieron alguna afectación y de estas, cuales pueden tener un arreglo y cuales deben ser demolidas y reconstruidas.
“Estamos en una situación de alerta, de pendiente para poder hacer un recuento y levantamiento, primero de los daños, para poder identificar los inmuebles que tengan afectaciones mayores y con base en eso hacer las recomendaciones”, dijo el titular del ejecutivo estatal.
El mandatario estatal visitó la escuela primaria “Generalísimo José María Morelos y Pavón”, donde verificó el estado en que se encuentra esta primaria que deberá ser demolida por completo y reconstruirse debido a las afectaciones estructurales que sufrió.
En este sentido, el gobernador se comprometió con los padres de familia para habilitar un espacio en el que puedan continuar con las clases los alumnos de este plantel educativo, esto ante la preocupación que le externaron las personas.
El saldo que se tiene en este municipio es de una persona muerta y las afectaciones se registraron en 120 casas, entre estas, al menos 30 son pérdida total como es el caso de varias de la comunidad de San Miguel Tecomatlán.
En este poblado, cuya actividad primaria es la venta de pan, muchas personas perdieron sus hogares y sus centros de trabajo pues los hornos donde producen su materia prima, se vinieron abajo.
Hugo García, vecino de esta comunidad explicó cómo fue que vivieron este sismo de magnitud 7.1.
“Tratamos de abandonar el trabajo pero no había forma de cómo salir porque todas las casas colapsaron, incluso no había paso por la entrada principal porque se juntaron barda con barda. Fue algo muy difícil para nosotros, ahorita si se dan cuenta dependemos mucho del trabajo”, aseguró el afectado.
Por otra parte, los integrantes del comisariado ejidal dieron a conocer que se presentó una grieta en el cerro de San Miguel que se extiende varios kilómetros y cuya oquedad es más amplia conforme avanza la fractura. Al respecto, los habitantes piden a las autoridades que especialistas puedan hacer estudios en la zona y descartar la posibilidad de un posible desgajamiento que en un caso extremo, pudiera sepultar a la comunidad.
