La negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos y Canadá pone especialmente nerviosos a los productores de textiles, camionetas, vehículos para el transporte de mercancías y manufactura en general.
Ariel Rodríguez Polo, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA) en el estado de México, precisó que las cargas arancelarias podrían incrementarse en estos sectores por lo que necesario buscar un plan B para poder distribuir las mercancías a otros puntos.
Aseguró en el caso del sector alimentario son los productores de melones, vegetales, espárragos y sandía quienes podrían incrementar de forma considerable el precio que se paga en aranceles actualmente y que podrían traer afectaciones en la comercialización y competitividad de estos productos.
Dijo que desde la Secretaría de Economía se ha planteado ya una estrategia para modificar el plan de comercialización que actualmente se tiene, de tal suerte que haya opciones para los productores y que no se dejen en la indefensión.
