Arte plástico en el Festival de las Almas

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El pasado 27 de octubre, en el primer día de actividades del XV Festival de las Almas, fueron inauguradas cinco exposiciones en el Museo Joaquín Arcadio Pagaza, que reflejan el talento de los artistas mexicanos, al tiempo que exhiben el legado de artistas extranjeros, quienes contribuyen al fortalecimiento de nuestra cultura e identidad.

Foto: cortesía

En ellas se muestra que México fue la casa del exilio y que gracias a artistas, poetas y escritores de diversos países como Leonora Carrington, que llegaron a nuestro país, se pudo enriquecer aún más su cultura.

Una de las exposiciones que estará en exhibición hasta el 31 de diciembre es «Luminar» del maestro Ricardo Fernández Ortega, quien hace referencia a la luz que ilumina nuestro camino; explicó durante el recorrido que cada cuadro es una inversión de tiempo de vida.

Es una exposición de obra artística, con sentido a las formas y a los colores, a los mundos propios que se han ido configurando, se trata de un trabajo de décadas de pincel en mano del artista en su atelier mexicano.

Réquiem Natura” es una exposición que podrán disfrutar hasta el 31 de diciembre, la cual muestra la técnica del esmalte industrial sobre fierro y la utilización de los trastes de peltre como soporte; la maestra Maritza Morillas, logró una interacción entre la obra artística y una pieza de uso cotidiano de forma tal, que cada elemento preservara su esencia en lo que se ha denominado arte-objeto.

La conjunción de la pintura en esmalte en vidrio que en México se conoce como peltre, es una innovación que realiza la autora en jarras, tazas, platos, azucareras, cucharas y ollas, y que ha permitido a la artista gráfica desarrollar una obra original, sumamente colorida, que también puede tener uso doméstico.

«La belleza de lo Inerte», es una muestra colectiva de las maestras Olinka y Naibí Domínguez. Olinka fundamenta su obra en torno a la reflexión sobre la impermanencia, el desgaste y lo roto para tratar de entender el momento social y económico en el que nos encontramos. Su propuesta aborda cementerios de carros, máquinas abandonadas, carnicerías, entre otros, todos estos despojos son un recuerdo de que nada es permanente, de que todo está en constante cambio.

Por otra parte, Naibí Domínguez, que en el año 2000, expandió sus estudios de pintura con el maestro Luis Nishisawa, plasma las técnicas antiguas de los flamencos y en esta ocasión exhibe algunos óleos de bodegones y retratos de mujeres.

En el patio del Museo se ubica «La Magia de la mitología celta a cien años», es una exposición en homenaje a los 100 años del natalicio de la gran Leonora Carrington que fue una mujer surrealista, escultora, escenógrafa, escritora, incluso, actriz; una artista inglesa adoptada por México durante 70 años. La exposición de más de 20 obras escultóricas estará exhibida hasta el 31 de diciembre.

Y finalmente la exposición colectiva del “Grupo Tlapa”, una muestra de trabajos pictóricos en diferentes técnicas, que se integra por obras de pequeño y gran formato, realizadas por oriundos y vecinos de Valle de Bravo; el grupo fue fundado por el pintor vallesano Gildardo Uribe, en el taller del Museo Joaquín Arcadio Pagaza, hace más de 15 años y es el resultado del proceso y continuidad del talento plástico.

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