Las frutas cítricas como las naranjas, los limones y las limas tienen un contenido en flavanonas, una clase de antioxidantes que previenen y retrasan enfermedades crónicas causadas por la obesidad en los seres humanos, así lo asegura una investigación realizada por la Universidad Estatal Paulista en Brasil.
Los resultados del estudio realizado con ratones de laboratorio, revelan que los roedores que tuvieron una dieta alta en grasas presentaban daños en las células en un 80% en la sangre y un 57% en el hígado, pero a los que se incluyó en su dieta naranja, limón y limas tuvieron una disminución de estos niveles en el hígado en un 50, 57 y un 64% respectivamente.
Además sus niveles de peroxidación lipídica en sangre se redujeron un 48% con el antioxidante de las naranjas y un 47% con el de los limones.
La conclusión de los científicos es que se debe de incluir en la dieta el consumo de estos cítricos porque luchan de forma efectiva contra las grasas.
