Con tres décadas de tradición, la señora Elvia Bezales de Fonseca ha sido la responsable de hacer felices a cientos de pequeños que se encuentran en el albergue del DIF estatal y el Hospital del Niño en la capital mexiquense entregando dulces y juguetes el primer día de cada año desde 1988.
Con el apoyo de decenas de toluqueños que se dan cita en la casa de la señora Elvia, ubicada en la colonia Seminario, para comenzar un recorrido hacia la catedral de la capital mexiquense a presenciar la primera misa del año.
Una vez terminada la homilía presenciada por el obispo de la Diócesis de Toluca, las personas que participan en esta acción, la cual definen como un agradecimiento a Dios, emprenden la peregrinación hacia el hospital del niño y al albergue para entregar los dulces y juguetes a los menores que han sufrido de abandono o que han sido retirados de sus familiares por maltrato.
Además, algunas personas contratan payasos, botargas o hasta luchadores para amenizar el inicio de año de estos pequeños.
“Cumplimos hoy 30 años haciendo esto. Invitamos a la gente a convivir con nosotros, nuestras imágenes nuestro Jesús de Nazaret para que nos acompañen y visitemos los hospitales y llevemos un regalo a los niños”
Este primero de enero de 2018, la señora Elvia, originaria de la capital mexiquense, y las personas que se sumaron a la procesión avanzaron por las calles de Independencia, Riva Palacio, Lerdo y Villada, hasta llegar a su destino, siempre resguardadas por elementos de la policía estatal y municipal.
