La empresa surcoreana Samsung Electronics, suspendió este viernes la ventas a nivel mundial del Galaxy Note 7, por la presencia de baterías defectuosas que causaron igniciones en algunas terminales.
Koh Dong Jin, director de la división de telefonía de la empresa señaló que se decidió suspender las ventas del Note 7 y ofrecer terminales nuevos a todos los clientes que los soliciten.
Así mismo reconoció que usuarios del nuevo «Phablet» se encuentran preocupados por la posibilidad de que el aparato que adquirieron pudiera quemarse durante el proceso de carga. Por lo que ofreció una revisión del aparato en el servicio técnico dónde se cuenta con un software que puede comprobar si el teléfono tiene algún problema.
Dependiendo del país en que se adquirió el producto, el proceso de revisión y canje podría durar más o menos según la disponibilidad de recambios, aunque prometió «la mayor rapidez posible».
Así mismo, Samsung pidió disculpas a sus clientes por la ignición de baterías ocurrida poco después del lanzamiento de este nuevo producto.
Cabe señalar que desde que el Galaxy Note 7 llegó al mercado el pasado 19 de agosto, varios usuarios denunciaron que el teléfono durante su proceso de carga había ardido en llamas.
Galaxy Note 7 es un «phablet» que cuenta con bordes curvos, una de sus principales novedades es la resistencia total al agua además de contar con un escáner de iris ocular, una pantalla de 5,7 pulgadas, cámaras de 12 y 5 megapíxeles y un lápiz óptico S-Pen.
