De acuerdo Karla Ortiz Gómez, investigadora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, pese a que las mujeres de los estados de Tlaxcala y el estado de México concentran las solicitudes y búsqueda de interrupción del embarazo legal en clínicas de salud de la Ciudad de México, las autoridades no muestran interés por atender este requerimiento.
Según la especialista, esta realidad obliga al poder legislativo a modificar la ley estatal ante un requerimiento que demandan las mujeres mexiquenses pues desde las instituciones de salud y aquellas encargadas de la protección de la mujer tienen un enfoque estrictamente familiar, dejando en segundo lugar el derecho a la mujer.
«En el proyecto de vida que quieras muchos piensan que sólo debes tener derecho a abortar si fuiste víctima de una violación o una cuestión de que peligre tu vida por el embarazo pero a largo plazo tener un hijo no deseado se ve en los niveles de maltrato infantil, abandono y desatención de amor en un pequeño, eso tiene repercusiones más serias en nuestra sociedad», afirmó.
Lamentó que pese a que la Corte Interamericana ya requirió otorgar este derecho a las mujeres, en el país prevalezca la visión de la iglesia pues a la fecha solo la Ciudad de México ha garantizado este derecho.
Explica que más allá de dogmas uno de los imperativos de lograr una adecuación como esta es garantizar el derecho a la libre determinación de las mujeres, la definición sobre su cuerpo pero también atender el proyecto de vida de cada persona, es decir que sea padre quien en verdad quiera serlo.
