El impacto económico que ha dejado la epidemia de Covid-19 en materia laboral alcanza los 13.9 millones de mexicanos, que al momento no cuentan con una fuente de empleo, esto significa el 39 por ciento de la población económicamente activa del país.
Dos de cada tres familias manifiestan que se han disminuido sus ingresos durante los últimos meses por recortes de personal, disminución de horas laboradas o la disminución que aplicaron las empresas en los ingresos de los trabajadores, en el 30% de los hogares mexicanos al menos una persona perdió su empleo.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografia dio a conocer los resultados de la Encuesta sobre el impacto en el mercado laboral resultado del Covid-19, Edgar Vielma, director de estadísticas socio demográficas del Inegi explico que el 37% de la población trato de resarcir sus ingresos económicos vendiendo algo, haciendo uso de sus ahorros o solicitando un préstamo familiar o personal.
La encuesta revela que el 23% de los trabajadores realizó labores de Home Office, es decir 7.7 millones de personas, 6.1 fueron enviados a sus casas como parte del confinamiento, de esto es el 44% y recibió una parte de su ingreso, 17.3% no recibió nada y sólo el 38% de quienes fueron enviados en casa están recibiendo su salario completo.
La mayor afectación se revela en el sector terciario, es decir servicios y comercio con el 71% de las personas que fueron enviadas al confinamiento por al menos algunas semanas.
En lo que refiere al equipamiento para poder realizar actividades productivas desde el hogar el 70% de los encuestados indicó que tiene el equipamiento necesario en materia tecnológica y despacio para poder realizar sus funciones, el 84% tiene condiciones de seguridad e higiene y el 27% ha realizado algún curso de capacitación para poder desempeñar mejor sus labores.
