Este 3 de mayo se celebra el Día Mundial del Asma y el Instituto Mexicano del Seguro Social, se suma a la conmemoración de esta fecha a través de la difusión de información sobre este padecimiento.
El asma es definido como un padecimiento crónico reversible que afecta las vías respiratorias encargadas de trasladar el aire hacia adentro y fuera de los pulmones, lo que provoca fuertes reacciones frente a aquellas cosas a las que el organismo es sensible (alérgenos), ocasionando que las paredes internas del sistema respiratorio se hinchen y que en consecuencia los pulmones reciban una menor cantidad de aire.
La doctora María del Socorro Romero Figueroa, coordinadora auxiliar de Investigación en Salud del IMSS Poniente explicó que los síntomas se presentan en forma de crisis, con sensación de opresión en el pecho, falta de aire, secreciones mucosas y rigidez torácica.
Puntualizó que el asma es catalogada como una enfermedad controlable, siempre y cuando se atienda de manera oportuna, ya que de no hacerlo, pueden presentarse episodios mucho más severos que provoca que los órganos vitales no reciban suficiente oxígeno, poniendo en riesgo la vida.
Para determinar el asma se realizan pruebas que incluyen auscultación física con estetoscopio para escuchar los pulmones y determinar si existen sibilancias o algunos otros sonidos relacionados con la enfermedad además de exámenes para medir el conteo de eosinófilos y de IgE, radiografía de tórax y pruebas de función pulmonar, indicó la especialista del IMSS Poniente.
Es importante apuntar que el tratamiento se divide en dos: controlar la inflamación de las vías respiratorias y minimizar las causas que originan o episodios asmáticos.
Regularmente se combina el tratamiento con medicamentos de control prolongado y los “de rescate” que son inhaladores y que se usan para dilatar loa bronquios en caso de un ataque.
Romero Figueroa destacó que el detonante recurrente en los casos de asma son los ácaros que son microorganismos presentes en almohadas, juguetes de peluche, cortinas, alfombras y de manera general, en los lugares donde se acumula polvo, pelaje de animales y polen.
