A cinco meses de que entró en vigor la disposición que prohíbe a los locatarios regalar bolsas de plástico, popotes y unicel en Toluca, comerciantes de la Central de Abasto ya presentan pérdidas de hasta el 40 por ciento.
Mencionan que hoy en día son pocos los comerciantes que acuden a las naves de la Central por bolsas de plástico o unicel, lo que les deja pérdidas de hasta mil pesos diarios, por lo que prevén recorte de personal.
Ante ello, vendedores han tomado algunas alternativas para subsistir, entre ellas ofrecer nuevos productos amigables con el medio ambiente.
Al principio, los clientes, dicen, se resistieron a esta medida, que busca ayudar al medio ambiente pero finalmente se han ido acostumbrando.
Cabe destacar que en Toluca, las sanciones para quienes incurran a esta falta van de 400 a ocho mil 500 pesos y comenzarán a aplicarse a partir del próximo 5 de agosto.