Ante la creciente comisión de delitos de robo de vehículos, de autopartes y de transporte en el Estado de México por falta de prisión preventiva, y con ello la libertad de los acusados en menos de 48 horas, el Grupo Parlamentario de Morena propuso modificar el Código Penal de la entidad para que sean considerados delitos graves.
“En la actualidad el delito de robo de vehículos estacionados en la vía pública, cuando se trata de desapoderar del mismo a su propietario estando estacionado, ya sea de la mercancía que transporta o de los objetos sin que éstos sean parte de los componentes que lo integran; no representa un agravante en cuanto a la comisión del mismo y permite que el Sujeto Activo quede en libertad de manera inmediata, siendo el caso que los índices delictivos del mismo continúen en aumento”, denunció el diputado Gerardo Ulloa Pérez.
Tan solo en la capital del Estado, se inician diariamente de 10 a 15 carpetas en promedio por robo al interior del vehículo estacionado, de las cuales solo 4 o 5 son con detenido, que finalmente es puesto en libertad una vez que vence el plazo de las 48 horas, por no ser considerado como delito grave o de prisión preventiva.
El legislador presentó una iniciativa que propone tipificar de manera clara el robo de vehículo estacionado, como parte de las agravantes de violencia en los bienes, dotando a la autoridad con mayores elementos legales suficientes para hacer frente a esta forma delictiva.
Mientras que el delito de robo al transporte en general, también refleja un incremento considerable en la comisión del mismo, pues ocurren en promedio 100 robos por semana al transporte de carga y que representan pérdidas de 2 mil 500 millones de pesos anuales a las empresas, entre vehículos y mercancía.
Tan solo para la Asociación Nacional de Empresas de Rastreo y Protección Vehicular, (ANERPV) durante el 2018, fueron atendidos 2,569 eventos, y de los que el Estado de México es líder con 671 hurtos, lo que representa el 36% de todos los eventos
La iniciativa promovida por Gerardo Ulloa establece que se tipifique como delito grave el robo de vehículos automotores, de transporte en todas sus modalidades y robo de autopartes. Y plantea que se impongan penas de 8 a 10 años de prisión por robo de vehículo estacionado, o autopartes, y multas de mil 50 días.
Mientras que para el caso de robo cometido en medios de transporte público de pasajeros, de carga, de personal, en cualquiera de sus clases y modalidades, o transporte turístico o escolar, se impondrían de 9 a 15 años de prisión y multa de uno a tres veces el valor de lo robado.
Y si en la ejecución del delito existen sujetos pasivos como mujeres, niños adolescentes o adultos mayores, se pena de 4 a 6 años de prisión al sujeto activo que los cometa.
