¿Ya ahora que pasó el Grito qué sigue? Pues revisar el calendario e identificar la siguiente fecha de asueto: ya sea por festividad oficial o por las sesiones del Consejo Técnico Escolar.
Los mexicanos no lo podemos negar: somos fiesteros por antonomasia. Escribiría nuestro Premio Nobel, Octavio Paz que “amamos las fiestas y las reuniones públicas”; que “todo es ocasión para reunirse”; que “cualquier pretexto es bueno para interrumpir la marcha del tiempo y celebrar…”.
Y así por tanto, la suspensión que viene es el 18 de noviembre, en dos meses exactamente, cuando conmemoremos 109 años de la Revolución.
Que siga más que la fiesta, el entusiasmo hacia la vida y los proyectos; el trabajo para estar, ser y tener. Pues aparte de todo, el día de fiesta, dinero cuesta.
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