Al menos 50 familias del municipio de San Mateo Atenco han cambiado su vocación zapatera por la falta de trabajo y han migrado a la elaboración de cubre bocas, así lo informó Felipe León Martínez, zapatero de generación.

Explicó que así como él, muchas familias zapateras se vieron en la necesidad de cerrar sus locales de zapatos ante la falta de gente que acuda a comprar sus productos, consecuencia de la emergencia de salud que se vive actualmente, por los casos positivos de COVID-19.
En total son dos mil 500 empleados de 50 familias los que se encuentran realizando hasta 50 mil cubre bocas a la semana.
Reconoció que al inicio apenas y vendían 80 cubre bocas por lo que no resultó como esperaban; sin embargo, con el paso de las semanas actualmente venden hasta 100 mil piezas a lugares como Sinaloa, Querétaro, Hidalgo, Ciudad de México, Metepec y Zinacantepec.
Cabe mencionar que las 50 familias estaban agrupadas en 20 talleres zapateros ubicados en el municipio de San Mateo Atenco.