La serie de verificaciones para asegurar el cierre de establecimientos que realizan actividades no esenciales puede prestarse a actos de corrupción, a que falsos verificadores pretendan sorprender a dueños de negocios o bien al cobro de multas de manera indebida.
Alberto Benabid Montero, presidente del Consejo de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción explicó que se han recibido ya algunas quejas en este sentido y la mayor parte se basa en que hay falta de claridad para el sector privado de quienes pueden permanecer abiertos y cuales son las sanciones aplicables.
“Los que se han quejado que han sido pocos es porque han llegado inspectores que les han dicho que es una multa de 80 mil pesos cuando menos, eso es lo que me refiero que deben hablar para informarse y corroborar con la dependencia como aplican las multas”.
De manera que las propias condiciones de la contingencia sanitaria hace más complicado el hacer la verificación del registro estatal de inspectores e incluso la presentación de las denuncias, pues en el caso del CPC se esta trabajando desde casa y no se cuenta con personal que vía telefónica reciba las denuncias, por lo que se hizo un llamado a los propietarios de negocios a respetar las disposiciones oficiales y a presentar dentro del portal de Gobierno estatal las quejas correspondientes.
“Hay un riesgo de que pueda haber clausuras indebidas o que realmente se preste a que inspectores o falsos inspectores quieran aprovecharse de la situación, la mejor opción que tenemos los ciudadanos es estar informados y tratando de hacer previamente el cierre de los negocios que deben cerrar”.
Indicó que además el riesgo es que los propietarios de establecimientos prefieran entregar recursos a un verificador que presentar la denuncia correspondiente, lo que además es un paso atrás en la cultura de la legalidad a la que se ha estado apostando.
Además se debe tener en cuenta que cualquier inspección que se realice debe estar avalada por papelería de la revisión realizada, los gafetes de los funcionarios que visitan los negocios y saber si realmente se cuentan con las facultades para realizar cada inspección.
