Conductores de dos líneas del transporte público que prestan servicio en este municipio, disputan derroteros y obligan a descender de las unidades a los usuarios, cuya integridad física está en riesgo en caso de que se susciten enfrentamientos entre los transportistas.
Por tal motivo, ciudadanos denunciaron que desde el pasado 12 de noviembre, choferes de la línea Montel Alto detienen autobuses de conductores disidentes de su organización, a los que acusan de prestar el servicio sin la autorización correspondiente. 
Los pasajeros afectados relataron que transportistas detienen las unidades supuestamente «piratas» y les piden descender, además de que les informan que el vehículo carece de autorización para prestar el servicio, lo que afecta sobre todo a usuarios de las colonias Progreso Industrial, El Gavillero y San Ildefonso.
Los afectados indicaron que pierden tiempo y son molestados con dichos «operativos» implementados por los propios transportistas, además de que corren el riesgo de ser lesionados durante un enfrentamiento entre choferes de ambos bandos.
Fuentes de la Secretaría del Transporte del gobierno estatal informaron que se trató de una confusión, pues la línea Monte Alto está renovando unidades, por lo que choferes de Rápidos de Monte Alto creyeron que se trataba de invasión de su ruta.
Agregaron que representantes de ambas líneas se reunieron este jueves con Martín Suárez, delegado en Naucalpan de la Secretaría del Transporte, con quien acordaron suspender las agresiones.
