Uno de los principales problemas que se tiene actualmente de cara a la reactivación económica en el país es la incertidumbre sobre cómo se va a dar este proceso, el tiempo que tardará y una estrategia clara para detonar nuevas inversiones y generación de empleo a nivel nacional.
Durante el quinto día de los “Diálogos por la recuperación económica del Estado de México”, Eduardo Sojo, director de Laboratorio de Políticas Públicas del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), explicó que se espera que el año siguiente la actividad económica en el país tenga una caída del 7.5%, de acuerdo con datos del Fondo Monetario Internacional.
Aseguró que el Gobierno Federal tendrá que cambiar la estrategia en materia económica que ha desarrollado hasta el momento y aplicar nuevas estrategias que permitan de manera más acelerada el apoyo a las unidades económicas y a la generación de recursos.
Entre estas las propuestas están el innovar en políticas públicas con financiamiento público -privado, el generar estrategias de factoraje que fortalezcan la industria, acciones específicas en materia de Mejora Regulatoria Toluca Y el desarrollo de proyectos de infraestructura local o regional.
Además deben retomarse proyectos que se han dejado de lado como es la generación de energía a través de fuentes renovables, y el tener agendas coordinadas para la atracción de inversiones, para lo cual los estados podrían comenzar a vender sea como una región y no de manera individual.
El reto será grande ya que se espera que sean más de 3 millones de personas las que se incorpore en el mercado laboral y que estén generando necesidades de acceso necesidades básicas y movilidad.
En el caso del estado de México desde el primer trimestre de 2020 y ese tenían caídas en materia de crecimiento económico, en donde se ubicó pon un 0.8% de decrecimiento
