Esta semana, el Instituto Mexicano de Cinematografía publicó las convocatorias mediante las cuales se otorgarán apoyos al cine mexicano de manera directa a productores, exhibidores y encargados de resguardar el acervo fílmico nacional.
En 2020, cuando se anunció la eliminación de poco más de cien fideicomisos; entre ellos FIDECINE y FOPROCINE, se generó una controversia e incertidumbre pues no se sabía exactamente de qué forma operaría el ahora llamado Fomento al Cine Mexicano (FOCINE).
En entrevista para Así Sucede, Noé Tovar, director de la Cineteca Mexiquense, consideró que el mecanismo que el IMCINE ha anunciado como parte del FOCINE, resulta esperanzador para el cine mexicano, pues son prácticamente los mismos apoyos que se entregaban con el fideicomiso anterior, aunque ahora operará con un presupuesto menor.
“Si se analizan las convocatorias, podemos ver que son los rubros que habitualmente apoyaba; sobre todo en las que tienen que ver con la exhibición de cine mexicano con apoyo a la exhibición y con apoyo a la preservación de acervos y eso es algo maravilloso porque de las 12 convocatorias que lanzó, nueve están dirigidas para la producción de cine y eso ya habla del interés principal. Al analizar las convocatorias nos damos cuenta cuál es la vertiente y nos damos cuenta que no cambian para nada[…] Esas nueve convocatorias se mantienen fieles a lo que venía siendo FIDECINE”.
Y es que las nueve convocatorias están dirigidas a cortometrajes y largometrajes en colaboración con los estados, la producción de cine para las infancias, óperas primas de escuelas de cine o con especialidad de cine; la preproducción y producción de cortometrajes y largometrajes de animación, la conformación y preservación de acervos cinematográficos, a los espacios de exhibición cinematográfica y a proyectos de formación de públicos y de exhibición de cine mexicano.
Sin embargo, hay una limitación en la convocatoria en la que dejan sin apoyos a espacios como la Cineteca Mexiquense.
“En el apartado 17º, 18º y 19º están especificados a quiénes están dirigidos estos apoyos. En el caso de Exhibición, van dirigidos únicamente a asociaciones civiles. Hay en el país, por lo menos, 32 cinetecas registradas; las cuales necesitan tener mejores equipos. De las 32 cinetecas, sólo 10 contamos con DCP para exhibir, eso es una gran limitante; las demás tienen que exhibir en blue ray y en DCP y se ve mermada la experiencia de ir al cine; de ver la película en pantalla grande porque no es la misma resolución. Pudiera convertirse en un área de oportunidad si se abriera [la convocatoria] en el área de exhibición a instituciones públicas como lo es una cineteca”, explicó.
Sobre la situación a la que se enfrenta la industria cinematográfica con el cierre de las salas de cine debido a la contingencia sanitaria, Noé Tovar consideró que el cine mexicano tiene un panorama complicado para este 2021, en especial si las carteleras se ven saturadas de producciones extranjeras.
“Se viene saliendo de un año complicado y se vislumbra un 2021 también complicado y más para el cine porque la gente no está yendo al cine. Aunque se reabrieron el año pasado la asistencia fue muy baja y ahorita todavía se encuentran cerradas las salas y sería un error que las salas abrieran privilegiando la cartelera con películas extranjeras. Sería una desgracia para el cine mexicano porque no serviría de nada que las salas se reabrieran si no hay lugares para exhibir el cine mexicano. Eso es lo verdaderamente preocupante”, finalizó.
Es así como 2021 será la prueba de fuego del Fomento al Cine Mexicano y también una prueba para las salas de cine que son las que finalmente decidirán cómo conformarán sus carteleras, si darán espacio al cine mexicano o privilegiarán a las producciones extranjeras en la búsqueda de sanar sus ingresos en taquilla.