El Colegio Mexiquense dedica la edición 2021 del Seminario Arqueología y Etnohistoria de Mesoamérica a reflexionar sobre los 500 años de la caída de México-Tenochtitlan, y la primera de las seis conferencias programadas, titulada «Símbolos indígenas y salvación cristiana en el siglo XVI», estuvo a cargo del investigador Pablo Escalante Gonzalbo.
El profesor-investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM ofreció una charla caracterizada por la erudición y, a la vez, la sencillez de la exposición, en la que sostuvo una tesis diferente a las interpretaciones que han visto a la participación de los artistas indígenas en el arte religioso de las primeras décadas de la Colonia como una involuntaria presencia de los restos de un estilo o bien como una presencia que se dio a escondidas y contracorriente de lo que querían los religiosos católicos.
Estudioso del arte y la cultura indígenas en el centro de México de fines del mundo prehispánico hasta el inicio del periodo colonial y autor de artículos y libros sobre diversos temas, el investigador sostuvo que hoy se sabe que la presencia de lo indígena en el arte cristiano del siglo XVI en la Nueva España fue un fenómeno extenso en el México central y que obedeció a un plan, en tanto presencia programática y razonada, acordada entre los religiosos y los indígenas.
Apoyado en una profusa iconografía, ejemplificó con elementos como el chalchihuite, la piedra con dos círculos concéntricos que representa una gota de agua, que se puede observar todavía en la arquitectura no de manera ocasional ni accidental, pues está empotrada en muros atriales, torres de campanarios y fachadas de algunos conjuntos.
Ese elemento se encuentra también en la arquitectura mesoamericana, como marcador de la montaña sagrada, Tonacatépetl, la cual contiene riquezas y es protectora y proveedora, y expresa en algún punto de las plataformas la fuerza interior de la montaña sagrada.
Habló también de la aparición de lo indígena en un programa del siglo XVI, para el caso el edificio conventual de Cuautinchan, Puebla, como una presencia que tiene mensaje reflexionado previamente para incluirlo en un contexto cristiano, donde fue aceptado y tuvo un sentido y una lectura, a lo largo de un proceso organizado por etapas.
Se refirió a la escuela de artes oficios de San José los Naturales, de la que se ocupó fray Pedro de Gante, que inició trabajos indígenas a partir de 1527, y dio otros ejemplos característicos de la presencia de los artistas y el arte indígenas en el arte religioso del siglo XVI.
Luego de que el presidente de El Colegio Mexiquense, César Camacho, dio un mensaje de bienvenida y destacó la trayectoria del seminario, el coordinador de este, Raymundo Martínez García, dijo que en las conferencias se abordarán aspectos de la conquista mexica, los actores que en ella participaron, su trascendencia en los procesos culturales del periodo novohispano, su significado para los grupos mesoamericanos y las propuestas de acercamiento y explicación del hecho.
El historiador aceptó que se trata de un tema polémico por estar imbuido de elementos ideológicos que han servido en la construcción de la identidad nacional, y por ello los ponentes ofrecerán un acercamiento crítico fundado y abierto a la discusión de la denominada «conquista de México», con el propósito de que el público conozca distintas perspectivas que le ayuden a formarse un criterio propio y entender que la Historia y las Ciencias Sociales no son un tribunal, sino una potente herramienta para pensar y explicar los problemas y preguntas que hoy nos hacemos.
La conferencia organizada para este miércoles 21 de abril a la una de la tarde es «Cuitláhuac: vencedor de los españoles», que será ofrecida por Patrick Johansson, otro reconocido historiador.
