La Procuraduría Federal del consumidor en el Estado de México ha detectado empresas que se dedican a la calibración de aparatos y realizan extorsiones a los comerciantes para obligarles a contratar el servicio con ellos.
Eric Medina, jefe de la Unidad de Verificación de la oficina en el valle de Toluca refirió qué esta situación se ha presentado principalmente en mercados municipales a los cuales acuden estas personas que se ostentan como verificadores y amenazan con la clausura de los negocios si no se realiza el procedimiento de calibración en ese momento.
Indicó que ninguna persona está autorizada para inmovilizar un aparato o sancionar un negocio más que los elementos de la Odeco plenamente identificados y recordó que al momento estas visitas sólo se pueden realizar tras una queja o denuncia ciudadana, por lo cual no hay visitas aleatorias ni operativos de revisión.
Recordó que todos los establecimientos que hacen uso de aparatos de medición, ya sea de peso, litros y en general los distribuidores de combustible, están obligados a calibrarlos y obtener el holograma que distribuye la Profeco, y este procedimiento puede hacerse en sus oficinas.
Los hologramas son emitidos una o dos veces por año dependiendo si los aparatos son nuevos o ya tienen un tiempo en operación.
Aún cuando las personas son libres de hacer calibraciones externas a la Profeco, esta no es una obligación.
