Cuando estamos de mal humor solemos consolarnos con ‘caprichos’ como compras, postres o fiestas con amigos. Sin embargo, un reciente estudio realizado por la Universidad del Sur, Sewanee, estado de Tennessee (EE.UU.) y publicado en la revista ‘Emotion’ determina que, por el contrario, lo que realmente ayuda a sentirnos feliz son los actos de generosidad hacia otras personas.
Así, la investigación señala que a través de brindar a los demás mejoramos nuestro estado de ánimo y el bienestar general. «No me sorprendió el hecho de que el comportamiento prosocial lleve a la gente a sentir mayores emociones positivas y sentirse más realizados», explicó la investigadora principal Katherine Nelson.
Sin embargo, la científica afirmó que le pareció interesante que «cuando dirigimos esas acciones hacia nosotros mismos, no vemos ninguna mejora en las emociones positivas o negativas ni plenitud psicológica».
Dichas conclusiones se han realizado a base de un experimento con 473 voluntarios que, divididos en varios grupos, tenían que llevar a cabo actos de bondad hacia otras personas y hacia sí mismos durante seis semanas. Los que realizaron los actos de generosidad ―como recoger la basura o comprar un café para un amigo― fueron más propensos a reportar el sentimiento de felicidad o de experimentar una mejora en el estado de ánimo que los que llevaron a cabo una conducta centrada en sí mismos.