Apenas terminó la temporada de lluvias sobre el territorio nacional y se vino la contaminación. La Ciudad de México es la que empieza con su declaratoria de contingencia ambiental por riesgo de ozono. Al respecto, la inhalación de ozono, incluso en pequeñas cantidades, puede irritar los pulmones y la garganta, provocar tos, dolor de pecho y falta de aire, así como mayor riesgo de infecciones respiratorias.
Aquí en Toluca la contaminación también es alta en estas fechas y se prolonga hasta inicios del próximo año haciendo a la vez que esta capital se dispute el primer lugar con otras grandes ciudades en materia de polución.
Ente las causas de la contaminación están las fábricas -que además operan según la demanda de productos-, la quema de combustibles, el transporte público y los hogares. En cuanto a los hogares los que están a la cabeza son los aparatos de calefacción, las cocinas, el humo del cigarro, los materiales de construcción, los productos de limpieza y de aseo personal. Por cierto, según la Organización Mundial de la Salud cada año mueren cuatro millones de personas por respirar aire contaminado en los hogares. Las lluvias diluyen las partículas contaminantes o barren fuera de las ciudades, aunque hay algunas que son inmunes. Lo que podemos hacer desde nuestra posición es usar menos el coche, consumir productos ecológicos, evitar el uso de plásticos y reciclar productos.