Melody Jackson profesora adjunta en el Instituto Tecnológico de Georgia, Estados Unidos, ha desarrollado una tecnología que da voz a los perros, habilidad que para ella es crucial en labores de búsqueda y rescate, detección de bombas y terapia con estos animales. Los canes llevan chalecos equipados con sensores que pueden emitir señales audibles o notificaciones de texto a un smartphone.
El equipo de investigación de Jackson, que incluye al profesor Thad Starner y al científico investigador Clint Zeagler, ha creado unos chalecos caninos de alta tecnología para un proyecto llamado FIDO (Facilitar la Interacción de Perros con Ocupaciones, por sus siglas en inglés). El programa cuenta con el patrocinio de The National Science Foundation y también de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados en Defensa de Estados Unidos, mejor conocida como DARPA.
Los chalecos también cuentan con la aprobación de Sky, el collie de ocho años de Jackson.
«De hecho nos ayudó a diseñar muchos de estos sensores al indicarnos qué funciona y qué no», explicó. «Así que en cierta forma él es nuestra primera línea de prueba antes de que los probemos en el resto del mundo. Él es parte esencial de nuestro equipo de diseño».
El chaleco tiene unos sensores laterales que el perro activa con una mordida o un toque con su nariz. Los entrenan con juguetes, distinguen entre un frisbee y una pelota y le dicen a su entrenador cuál es cual. Jackson explica que esto es un ejemplo de una «tarea de discriminación» que puede traducirse en tareas más importantes, tales como la detección de bombas, situación en la que el perro le indicaría a su entrenador qué explosivo ha detectado.
Jackson ha estado observando los entrenamientos de los perros detectores de bombas con la esperanza de probar sus chalecos con los canes que patrullan los campos de batalla junto con los soldados.
Jackson y su equipo también desarrollaron un chaleco de alerta médica con el que el perro puede encontrar a una persona perdida o atrapada, activar un sensor y darle a entender a la persona que la ayuda está en camino. Esta tarea podría ser esencial en caso de un terremoto o en rescate en desastres.
Los perros de Jackson también están entrenados para distinguir entre un timbre y una alarma de incendio y activar el sensor correcto en su chaleco para enviar un mensaje de texto al teléfono celular de su dueño.
Jackson dijo que uno de sus perros pudo entender el chaleco y sus funciones en apenas 27 segundos. Ella cree que cualquier perro al que se pueda entrenar podría entender la tecnología muy rápido.