Este miércoles se conmemora el Día Internacional de la Mujer. Se instauró como fecha en 1975 por la Organización de las Naciones Unidas y de lo que se trata es reconocer su rol en la sociedad, su derecho a un desarrollo íntegro como persona y a la igualdad con respecto al hombre.
Y si bien hay avances en los distintos sectores sociales, la realidad de la mujer en México es de agresiones sicológicas, físicas y sexuales, discriminación, falta de acceso a la educación y salud, matrimonio infantil, desempleo y bajos salarios, pobreza y homicidios. Se le dejan las funciones del hogar; que sean amorosas, sumisas, abnegadas, fieles y con su esencia de la maternidad, como si fueran un objeto o pertenencia de alguien. Se dice que deben cuidar a la familia y a las demás personas, que tienen que vestirse de forma femenina o aceptable, estar delgadas y, si van a estudiar, que sea algo acorde a su sexo.
Todo lo anterior son estereotipos, opiniones y prejuicios y por lo tanto, creencias, de lo que debe ser una mujer lo cual es nocivo y perjudicial porque se atenta contra su capacidad de pensar, su identidad, gustos y actividades. Cada mujer puede y debe decidir qué hacer con su vida, su cuerpo y su entorno y se le tiene que respetar, reconocer su decisión y c. Es un acto de congruencia y justicia.
