A partir de esta semana y hasta el próximo 1 de septiembre las casas de empeño registran un aumento de pignorantes, derivado del regreso a clases.
A decir de encargados en los últimos días han notado una mayor cantidad de padres y madres de familia que acuden a sus centros, a fin de intercambiar prendas por dinero.
Y es que a decir de los padres de familia, la economía familiar se encuentra tan inestable que tienen que recurrir al empeño, a fin de obtener una ganancia y cumplir con la lista de útiles.
Los productos que mayormente empeñan son celulares, aparatos electrónicos y joyas.
Un análisis realizado por la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) estima que para este ciclo el gasto por alumno ascenderá a siete mil 200 pesos, 30 por ciento más en comparación con el año pasado, de ahí que los padres de familia recurran al empeño para salir del paso.