4 de cada diez pesos que pasan por la economía de nuestro país provienen de la economía informal lo que tiene una serie de efectos negativos sobre el desarrollo económico y social de la población; que de manera gradual generan un efecto de pauperización del empleo.
De acuerdo con una estimación del Instituto Nacional de Estadística y Geografía el 24 por ciento del Producto Interno Bruto Nacional se genera en esquemas informales, lo que evita que la población tenga acceso a servicios de salud, prestaciones como créditos personales y a la vivienda, generaciones de trabajadores que no tendrán acceso a una pensión o incluso al retiro.
Cynthia Valeriano Lopez, Profesora Investigadora del Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey explicó que este fenómeno tiene diversas causas, como la complejidad que tienen las unidades económicas para operar en la formalidad por la serie de trámites, tiempos y costos que implica, la eliminación de buena parte de la política de promoción del emprendimiento formal e incluso temas relacionados a la seguridad.
La proliferación que al momento se tiene de emprendimientos en la informalidad a través de bazares, redes sociales y ejercicios de economía en pequeña escala ha ido en creciente y sin aparentes repercusiones lo que hace que la generación de recursos a través del pago de impuestos represente apenas 17 de cada cien pesos en el país.
“Eso provoca que muchas personas prefieran irse por la libre, emprender de manera informal y de esa forma ahorrarse el costo que implica llevar a cabo la formalización y llevar a cabo una actividad ordenada”
En el tema de la inseguridad señaló que otro de los factores que se han hecho visibles es que las unidades económicas prefieren mantenerse en péquelo para evitar ser victimas de la delincuencia organizada, mantenerse fuera de la revisión de la autoridad fiscal y por ende condiciones poco favorables para sus trabajadores.
