Al momento, más de la mitad de los zapatos que se comercializan en todo el país provienen de países asiáticos, particularmente de China, con menor calidad y materia prima mucho más barata, se han convertido en una amenaza para la producción nacional y artesanal que ha visto disminuidos sus ingresos y fuentes de empleo de manera considerable.
Esto, a pesar de que a finales del mes de septiembre el Diario Oficial de la Federación publicó la aplicación de cuotas compensatorias para el ingreso de calzado chino cercanas al 18 por ciento. Estas acciones se suman al tope arancelario que al momento está aplicándose del 35 por ciento y el impuesto al valor agregado. Sin embargo, la introducción de calzado a través de plataformas digitales sigue siendo una constante.
Mauricio Massud Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México, señaló que la situación es similar a la de otros productos, como los relacionados a la jarcería, plásticos, ropa y otros bienes en los cuales se evade el pago de impuestos en lo que se ha llamado “importaciones hormiga” ya que al ser paquetes con un valor menor a 50 dólares se evaden dichas contribuciones.
“Solamente durante el año anterior, la importación de calzado a través de plataformas digitales fue ganando mercado y alcanzó un monto superior a los cuatro mil millones de dólares sin pagos correspondientes de aranceles, la condición se hace similar a las de las tiendas de productos asiáticos que evaden el pago de impuestos cuando la paquetería es menor a 50 dólares, seguimos hablando de estas plataformas asiáticas que importan miles y miles de dólares todos los días y que dejan un hueco no sólo al erario público, sino la generación de fuentes de empleo al desarrollo de las empresas locales”, indicó Massud Martínez.
Solo en el caso del municipio zapatero de San Mateo Atenco se estima que son más de dos mil 500 los productores de calzado, lo que ha dado identidad y empleo a prácticamente toda la comunidad y generado una cadena de valor importante, por lo que insistió, es necesario tomar medidas que puedan garantizar una competencia en igualdad de condiciones.
También, dijo, se requiere la aplicación de certificaciones, capacitaciones y modelos de modernización que permitan hacer más competitivo al sector.
Finalmente, explicó que, al momento, uno de los principales impedimentos que se tienen en la materia, es que las autoridades chinas mantienen subsidios para la exportación de productos, es decir en este caso, los zapatos son comercializados con un precio mayor dentro de su propio mercado local y reciben subsidio cuando estos salen para ser vendidos en el extranjero.
