La técnica del aislamiento absoluto en odontología disminuye la contaminación cruzada que puede existir en la boca, contribuyendo a un mejor tratamiento del paciente, afirmó el investigador de la Universidad Autónoma del Estado de México, Raúl Argüello Sánchez.
Como parte del Seminario de Conferencias en Línea de Odontología “Encerrados pero educados”, Argüello Sánchez dictó la conferencia “Aislamiento absoluto en odontología”.
El académico explicó que esta técnica ha tenido un repunte en su implementación por parte de los ortodoncistas, debido a los resultados positivos que tiene al aplicarse en el tratamiento, entre los que destacó un mejor acceso visual y operativo del profesional; retracción y blindaje de tejidos blandos; un campo operativo aséptico, blando y sin humedad.
Asimismo, indicó que hay una eficacia mejorada de los materiales adhesivos que se aplican, protección para pacientes y profesionales en cuanto al cruce de algunos fluidos que pudieran presentarse, reducción del tiempo operatorio, comodidad para el paciente y el profesional, así como una calidad de rendimiento mejorada.
Justamente, dijo Argüello Sánchez, “se evita la contaminación cruzada que se genera en boca, lo cual ayuda bastante; además, el paciente no está escupiendo y hay un control preciso de la humedad”.
Aunque el aislamiento absoluto en la odontología es una técnica antigua, reconoció que es un tema al que se le da auge en la actualidad, porque permite que el profesional se centre en el objetivo a tratar, sin que existan distractores.
Manifestó que el material más utilizado para el aislamiento es el látex; sin embargo, dijo, hay un porcentaje de pacientes alérgicos a él, por lo que recomendó probar con otros materiales como el silicón.
Ante la pandemia de COVID-19, Raúl Argüello Sánchez recomendó a los ortodoncistas que en caso de que sea necesario atender una urgencia, el aislamiento odontológico es imprescindible, ya que disminuye la contaminación bucal. De igual manera, sugirió desinfectar el área antes de empezar a trabajar, así como los dientes, con la finalidad de disminuir la cantidad de microorganismos en la boca.