Con la llegada del periodo vacacional de verano, llegan gastos extraordinarios al interior de las familias, que llegan a hacer hasta un 30 por ciento más en comparación con un día normal de clases.
Madres y padres de familia, indican que en una semana normal invierten hasta mil pesos en la compra de comida, pasajes y snacks y durante los periodos vacacionales, este gasto se eleva hasta 100 por ciento, principalmente por la compra de antojitos extraordinarios y cursos de verano.
Es por ello que dicen buscan hacer presupuestos financieros, a fin de evitar gastar de más y verse afectados a final del mes, sobre todo con la compra de útiles escolares, uniformes, y preinscripciones e inscripciones.
La planificación de la economía doméstica consiste en realizar una gestión eficiente del capital para cubrir los gastos derivados de las necesidades y actividad diaria.
Los expertos recomiendan que a la a la hora de planificar la economía de una familia, el primer paso es elaborar un presupuesto en el que se reflejen todos los gastos, diferenciando entre gastos fijos y variables, viendo cuáles son imprescindibles y cuáles son prescindibles y, entre éstos últimos, cuáles nos dan bienestar o calidad de vida y cuáles son superfluos.
Además, de que recomiendan dejar un margen para los gastos imprevistos, que salen durante los periodos vacacionales
