El anuncio de incremento de aranceles en aluminio y acero que realizó el presiente de Estados Unidos, Donald Trump, y la respuesta del gobierno mexicano con una nueva imposición en carne de cerdo, uvas y manzanas, entre otros bienes; solo ha desencadenado una guerra comercial que no beneficia a nadie.
María de Lourdes Medina, presidenta del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México aseguró que estas medidas afectan las oportunidades de negocio que se tienen y puede traer estancamiento económico.
Indicó que se espera que haya una postura firme del gobierno federal que proteja a las empresas mexicanas y que permitan seguir detonando el intercambio comercial
Entre los sectores que dijo sufren más este tipo de medidas están en automotriz, metal mecánico y metalúrgico.