Por considerar que corresponde al estado fortalecer y transformar la dinámica social para permitir a los trabajadores ser partícipes del acontecer familiar y social, es decir, “hacer comunidad”, la 60 Legislatura aprobó un exhorto a las dependencias públicas, a los 125 ayuntamientos y a las empresas de la entidad a establecer horarios que permitan la compatibilidad entre la vida familiar y las actividades laborales.
Por unanimidad y previa dispensa de trámite a comisiones, la Asamblea avaló la iniciativa respectiva presentada por el Grupo Parlamentario del PAN en voz de la diputada Brenda Escamilla Sámano.
Conforme al documento, es necesario transitar a un nuevo modelo de horario laboral, pues los nuevos tiempos han visto la aparición de una serie de problemas causados en menor o mayor medida por horarios de trabajo excesivo: desintegración familiar, problemas de salud relacionados con el estrés y problemas de movilidad en las zonas metropolitanas, entre otros.
La jornada laboral flexible, añadió, que permitiría un mejor desarrollo familiar es una inversión de mediano plazo para un mejor desarrollo generacional: los menores de edad que crezcan con la atención integral de sus padres serán ciudadanos que tengan mejor formación y menos propensión a la desintegración familiar y social; la presencia de los padres en los hogares fortalecerá y complementará la labor educativa de los profesores y aportará los elementos básicos de la educación cívica y moral de los niños y adolescentes.
Al señalar que según la Organización Internacional del Trabajo la salud de las personas es la primera afectada por las largas jornadas de trabajo, apuntó que Suiza es uno de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con mejor balance entre trabajo y vida personal. Sin embargo, en este aspecto México está rezagado, pues de los países miembros del organismo sólo se encuentra detrás de Turquía dentro del rubro de naciones con el mayor porcentaje de empleados que trabajan más de 50 horas a la semana en promedio.
Por otra parte, después de afirmar que en México no se ha modificado el modelo desde hace más de cincuenta años, informó que el motivo que ha llevado a algunas empresas a reducir la jornada laboral es que “las estadísticas muestran que más horas de trabajo no llevan necesariamente a mayor productividad y mucho menos a mayor bienestar”.
La legisladora agregó que la búsqueda de una mejor calidad de vida es la clave que explica la necesidad de reducir la jornada laboral actual porque, incluso un par de horas, permiten al trabajador conciliar el tiempo con su familia, preocuparse por cuestiones como el ejercicio y una mejor alimentación, así como invertir su tiempo en aprender cosas nuevas e incluso seguir con su desarrollo profesional.
