A pesar del bullicio en las calles, las detonaciones rompieron la calma de la noche en el municipio, donde no cesa la violencia ni las ejecuciones de policías.
Fueron dos momentos: una ráfaga de al menos 10 disparos, y una segunda de cinco o seis, después, la calma tensa que vivieron por instantes los vecinos que escucharon cómo las balas rompieron el aire y, después se enteraron, le quitaron la vida a Miguel Ángel Monroy, de 38 años de edad, recién nombrado comandante adscrito al Ministerio Público Especializado de la Violencia contra la Violencia Familiar en Ecatepec.
Al filo de las 22:00 horas, el ministerial, que conducía su camioneta Blazer Expedition, color vino, con número de placas 472-VUB, se estacionó por unos instantes sobre la vía José López Portillo, frente al restaurante Los Arcos, presuntamente para esperar a una persona, que aun no se sabe si llegó o no.
Acompañado de uno de sus hijos, y una sobrina que llevaba en sus manos un bebé, Miguel Ángel Monroy recibió 17 impactos de bala que le propinó un sicario.