Médicos especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), atienden en Hospital General de Zona número 1 en Villa de Álvarez, Colima, a un pequeño que con tan solo 10 meses de edad pesa 28 kilogramos.
En el diagnóstico para combatir su sobrepeso, trabajan pediatras, nutriólogos, endocrinólogos, neurólogos y cardiólogos, con el propósito de conocer las causas que originan su crecimiento anormal y dar seguimiento al tratamiento para reencausar su desarrollo.
Los padres del menor aseguraron a los médicos que su hijo nació con peso y talla normal, pero desde su primer mes de vida comenzó a subir de peso aceleradamente y a presentar dificultades para respirar, sobre todo al dormir, y al moverse.
Desde los primeros días de julio, el pequeño comenzó a ser atendido en el Hospital General de Sub-Zona número 4 de Tecomán, Colima, del cual fue canalizado al Hospital General en Villa de Álvarez, uno de los más modernos del IMSS inaugurado el pasado mes de mayo por el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto.
El 20 de julio recibió consulta de pediatría, y el 31 del mismo mes se le dio seguimiento con diagnóstico inicial de obesidad mórbida. En esas fechas, el servicio de pediatría registró un peso de 19 kilogramos. Después fue referido al servicio de cirugía general por el hallazgo de una hernia umbilical.
El 1 de agosto se le realizó valoración en el servicio de nutrición y el 6 de septiembre se le atendió en consulta externa de pediatría, de donde fue canalizado a los servicios de neuropediatría y endocrinología pediátrica.
El 12 de octubre pasado, ya en el Hospital General de Zona número 1, en Villa de Álvarez, fue valorado por el servicio de nutrición clínica, otorgándole un plan nutricional, y se le realizaron exámenes de perfil hormonal, además de rayos X y ultrasonido. Nuevamente se le citó para darle seguimiento en la especialidad de endocrinología pediátrica.
El 16 de octubre, el menor de 10 meses de edad fue atendido por médicos especialistas de medicina física y rehabilitación donde recibe estimulación temprana dos veces por semana.
La semana pasada, nuevamente los padres con el menor se trasladaron al hospital en Villa de Álvarez donde fue atendido por endocrinólogos pediatras y nutriólogos, además de que se le realizaron estudios de laboratorio. Los resultados se conocerán a mediados de noviembre.
Aprovechando la moderna infraestructura digital con que cuenta el Hospital General de Zona número 1 de Villa de Álvarez, el equipo multidisciplinario de especialistas mantiene una estrecha comunicación con galenos de Guadalajara para intercambiar opiniones en torno al diagnóstico de la enfermedad que padece el menor.