Al año, el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMYM), a través de su Hospital Materno Infantil, registra dos mil 800 nacimientos, de los cuales más del 25 por ciento requieren hospitalización y atención médica específica. Aproximadamente 525 de estos ingresos son prematuros.
“Un bebé prematuro se refiere a todo aquel que nace antes de la semana 37 de gestación, por lo que sus órganos no están completamente desarrollados, de ahí la importancia de dar un apoyo integral para aumentar la sobrevida del paciente, señaló Gabriela Corona Martínez, Jefa del Servicio de Neonatología de esta unidad médica.
La especialista refirió que el ISSEMYM otorga apoyo personalizado para poder servir a las mujeres gestantes y conocer cada etapa de su embarazo, lo que les ayuda a detectar con anticipación las condiciones en la salud del bebé, que influyen en su nacimiento.
Corona Martínez sostuvo que los cuidados del prematuro dependen de las semanas de gestación, así como de las enfermedades durante el embarazo en la madre y que tengan una consecuencia en el bebé, tales como complicaciones respiratorias, anormalidad en la temperatura corporal, hemorragias y problemas metabólicos; por consiguiente, se recomienda extremar la vigilancia para evitar complicaciones e incluso la muerte.
En el marco por el Día Mundial de la Niña y el Niño Prematuro, que se celebra cada 17 de noviembre, la médica del ISSEMYM reiteró la importancia de esta fecha, ya que a nivel mundial mueren un millón de bebés prematuros; esto indica la necesidad de procurar el incremento de la sobrevida, a través de la concientización en el tratamiento y vigilancia durante el embarazo, concluyó.