Detectar el cáncer de mama con tan solo una muestra de saliva podría ser una realidad cercana ya que investigadores del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey campus Estado de México, desarrollaron una prueba de diagnóstico temprano.
En más del 95 por ciento de los casos de cáncer de seno, las mujeres producen en la saliva una proteína llamada c-erbB-2 justo al inicio del proceso de crecimiento del carcinoma.
El dispositivo creado por el equipo del Tec de Monterrey es un sensor que se encuentra en una película fina nanoestructurada que es capaz de detectar esta proteína, logrando así una detección temprana para que las pacientes reciban tratamiento.
En México cada año se diagnostican entre 18 mil y 20 mil casos de cáncer de mama, de los cuales cada día mueren en promedio 15 mujeres porque la mayoría de los casos se detecta en etapas avanzadas.
Por este motivo, este dispositivo sería una alternativa de diagnóstico muy poderosa porque podría llegar a sectores sociales que no pueden tener acceso a infraestructuras, sofisticadas que son costosas.