En el proceso que ha seguido la educación en el país a través de clases virtuales debido a la pandemia de Covid-19, se registra ya una etapa de desesperación, de ansiedad, de angustia y de resistencia para no adaptarnos a algo que queremos que se modifique, así lo destacó el coordinador del Centro de Estudios Psicológicos Integrales ( Cespi) de la Universidad Autónoma del Estado de México, Alejandro Gutiérrez Cedeño.
Y es que, agregó, a más de un año de haber adoptado el sistema de clases a distancia para el aprendizaje, agregó, hay un agotamiento físico por los espacios tan reducidos, la poca socialización que ha generado este tipo de enseñanza, además, en algunos casos, por la pugna en los equipos para acceder a las clases.
Sin embargo, comentó que si bien es cierto, tanto alumnos, maestros y las familias atraviesan por ésta condición, estamos en una etapa donde hay cada vez más gente vacunada, donde ya se habla de sector de los maestros y próximamente del proceso de aquéllos de entre 50 a 59 años.
Ante esta fase que se vive en la educación, el especialista recomendó rolar entre los miembros del hogar las funciones y actividades dentro del hogar, esto, como el primer principio de salud mental. Además comenzar a recurrir de manera responsable a los espacios públicos, como parques, que ya se están abriendo.
Es importante, agregó, la activación a través de juegos de mesa, las reuniones sociales de manera virtual, entre amigos y compañeros, pero si se tiene contactos con vecinos, amigos o familiares de forma presencial, deberá ser tomando todas las medidas para generar ambientes seguros.
En el caso de los profesores, aconsejó que busquen espacios de 30 a 40 minutos donde haya tranquilidad para el disfrute de una buena música o una película y dejar
de lado su actividad tanto familiar y laboral.
