La alicina es un compuesto del ajo que tiene potentes propiedades medicinales, la cual se obtiene al picar, machacar o masticar el ajo.
Este compuesto de azufre que da el característico olor al ajo, aporta múltiples beneficios a la salud, así lo revela un estudio realizado por el Centro Provincial para el Control y Prevención de Enfermedades de China.
De acuerdo con los investigadores, las personas que comen ajo crudo al menos dos veces a la semana tienen 44 por ciento menos de riesgo de desarrollar cáncer de pulmón.
Esta investigación señala que los antioxidantes del ajo tienen efectos preventivos de Alzheimer y la demencia, además de reducir el estrés oxidativo en personas con hipertensión.
Otros estudios han comprobado científicamente que el ajo es un condimento ideal debido a que contiene pocas calorías, pero es muy rico en vitamina C, vitamina B6 y manganeso, previene el daño celular y el envejecimiento.