Ante el riesgo de la suspensión del servicio de uso de drenaje en la Ciudad de Toluca, el sector comercio y de restaurantes en la capital mexiquense tendrá un mes para regularizar su situación en el tema de descargas residuales mediante una acuerdo conseguido con el municipio de Toluca ante el proceso de cobro que ha emprendido la autoridad municipal.

Avalados en un decreto de 1998 el municipio inició un proceso de cobro por las descargas y la aplicación de multas similar al que se ha desarrollado con el sector industrial.
Alejandro Rayón Montes de Oca, presidente de Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en el Valle de Toluca explicó que el acuerdo aplica para cuatro mil unidades económicas deberán hacer además un estudio sobre el estado en el que se hacen las descargas con mediciones de contaminantes que pudieran emitirse.
Una vez regularizada la situación los establecimientos deberá hacer el pago del permiso de manera anual que se calcula de acuerdo al número de comensales de cada restaurante, pero en promedio es de mil pesos.
«Nunca nos habían cobrado este permiso, si lo revisamos yo creo que solo el uno por ciento de los restaurantes contaban ya con este permiso y ahora el chiste es ponernos al corriente».
Los pagos de regularización pueden ir de los tres a siete mil pesos y las multas que se habían fijado podían alcanzar hasta los 90 mil pesos, sin embargo el acuerdo elimina las multas al 90 por ciento.
Al momento este es el único municipio que inició un proceso de suspensión del sistema de descargas residuales y con quien se ha tenido que emprender un proceso de negociación.
Los laboratorios que pueden hacer el estudio son limitados en el estado, por lo que de están apresurando los procesos para poder cumplir el acuerdo y presentar el estudio en las próximas semanas.