La lista de políticos, empresas, artistas, deportistas, dependencias gubernamentales y organizaciones a las que el SAT les condonó miles de millones de pesos en impuestos es al menos indignante.
El SAT no le perdona a ninguna pequeña o mediana empresa, a ningun prestador de servicios o emprendedor que se atrase en sus declaraciones fiscales. Pero sí le condonó 16 millones de pesos a Yeidckol Polevnsky o 328 millones al Deportivo Cruz Azul o 23 millones a Paulina Rubio.
El presidente López Obrador dice que las condonaciones era legales. Empezando por la de la dirigente de su partido.
Y sí, eran legales, pero profundamente injustas. Porque aunque esos personajes podían y debían pagar impuestos, gracias a sus relaciones no quisieron y no pagaron impuestos.
Son 247 mil millones de pesos. Es un monto equivalente a 4 veces lo que costará el tren México-Toluca, que no se termina, paradójicamente, por falta de recursos.
