De reprobable calificó la secretaria de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados federal, Mónica Bautista Rodríguez, la actuación del ex coordinador del Instituto de Salud del Estado de México, Carlos Aranza Doniz y a su asesor, José Fernando Gil García, por acudir al súper Bowl, cuando la entidad mexiquense se encuentra en semáforo rojo por el Covid-19, “hospitales rebasados en capacidad, además de que es una de las entidades que ocupa uno de los primeros lugares en contagios y número de personas fallecidas por la pandemia”.
De acuerdo con un comunicado, la diputada federal del PRD elogió que la Secretaría de Salud del estado de México hayan decidido cesar a estos dos funcionarios que “priorizaron un evento masivo de carácter deportivo, por encima de la salud de miles de mexiquenses y del esfuerzo de trabajadores de la salud, personal de laboratorio y limpieza que tienen más de 10 meses trabajando sin descanso e incluso horas extras, con salarios míseros, mientras los funcionarios destinaron entre 200 mil pesos a 500 mil pesos por el pago de boletos del súper Bowl”.
Bautista Rodríguez consideró que esta actitud “parece una burla por parte de los funcionarios, al gastar cada uno más de 200 mil pesos para un partido de fútbol americano, más los gastos del viaje, cuando los médicos mexiquenses carecen de salarios dignos, que les niegan los equipos de protección personal, que deben de adquirir con sus propios recursos”. Agregó que otros médicos que enfrentan la pandemia en los hospitales del ISEM carecen de contratos, prestaciones mínimas de ley, mientras los funcionarios demuestran que sus salarios son ostentosos que inclusive “se dan el lujo de derrochar” en eventos deportivos fuera del país.
La diputada federal por el estado de México, precisó que “el personal médico y resto del equipo que está en la primera línea de batalla contra la pandemia llevan más de diez meses luchando contra un virus que desconocen, el personal ya está fatigado, cansado, no cuentan con descansos, sus salarios son paupérrimos, carecen de equipos de protección personal que debe proporcionarle el ISEM, mientras los funcionarios están distraídos de sus actividades y les importa poco el esfuerzo de médicos y la salud de los mexiquenses”.
Bautista Rodríguez añadió que el cese de ambos funcionarios debe servir de escarmiento hacia el resto del personal de altos mandos del ISEM, para que tomen con responsabilidad su compromiso de servicio de salud con los mexiquenses y se solidaricen con el personal médico de enfermería, laboratorio y de limpieza a fin de que enfrenten en equipo el manejo y control del Covid-19 en el estado de México.
