Los pacientes con dolor crónico pueden aliviar el malestar durmiendo más horas, así lo asegura un estudio realizado por médicos y especialistas del Hospital de Niños de Boston en Estados Unidos.
Durante la investigación realizada con ratones de laboratorio, se descubrió que los roedores a los que se les suprimía el sueño mostraban mayor sensibilidad al dolor que aquellos a los que se les permitía dormir por lapsos mayores a los acostumbrados.
Los ratones que dormían menos, también presentaron mayor resistencia al efecto de los analgésicos e inclusive a la morfina.
Los médicos señalan que este tratamiento paliativo no tiene efectos secundarios y es más eficaz y barato para los pacientes.
De poder aplicarse a humanos estos resultados abrirían camino a nuevas formas de lucha contra el dolor crónico, un mal que aqueja a una de cada cinco personas.