El consumo de botanas fritas en México es un buen mercado pues tan sólo entre el año 2008 y el 2014 se duplicó la compra de este tipo de alimentos en el país.
Influenciados por esta circunstancia, estudiantes de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional elaboraron una botana hecha a base de jícama, pepino y zanahoria, la cual aporta alto contenido en fibra.
Sus creadoras aseguran que esta golosina nutritiva puede representar una alternativa para saciar el hambre ya que es baja en calorías porque está deshidratada, posee alto contenido de fibra que ayuda a mantener saludable el sistema digestivo, además de aportar al organismo minerales como calcio, fósforo y magnesio.
La botana fue elaborada en dos presentaciones, una natural que no contiene sodio y otra con chile que únicamente tiene 15 miligramos de dicho elemento, en contraste con algunos productos comerciales que poseen hasta 290 miligramos.
El producto no contiene aditivos y fue empacado al alto vacío, por lo que se conserva en buen estado hasta por un mes sin necesidad de incorporarle aditivos ni conservadores.
Las estudiantes ya planean comercializar estas botanas.
