Incluir frutas y verduras en la alimentación diaria ayuda a reducir el riesgo de estrés, especialmente en las mujeres.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Sídney (Australia) asegura que los adultos que consumen entre tres y cuatro piezas de frutas y verduras diariamente tienen un 12% menos de probabilidades de experimentar estrés que los que comen de cero a una porción diaria.
Los científicos descubrieron que aumentando la dosis, de cinco a siete piezas de frutas y verduras cada día, se reduce 14% el riesgo de estrés, en comparación con los adultos que consumen de cero a cuatro piezas al día.
Estos beneficios favorecen más a las mujeres pues la investigación revela que las féminas que consumían de cinco a siete piezas de frutas y verduras cada día tenían un 23% menos riesgo de estrés, en comparación con las mujeres que consumían cero a una porción por día.
