Ser joven pobre, mujer e indígena acrecienta los grados de vulnerabilidad que las y los jóvenes enfrentan en México, y a estos factores se suma una identidad de género diferente a lo aceptado, el acoso escolar, el ciberbuylling y el crimen organizado, todo lo cual hace difícil la transición de la vida adolescente a la vida adulta y tiene repercusiones económicas y sociales, a veces irreversibles.
Para responder a la pregunta acerca de lo que se puede hacer para ayudar a una transición plena de las y los jóvenes a la vida adulta, en el libro Jóvenes y vulnerabilidad social en el México actual. Aproximaciones desde lo laboral, sexual-reproductivo y educativo se ofrecen reflexiones sobre las opciones disponibles.
La obra, editada por El Colegio Mexiquense y coordinada por Arlette Covarrubias Feregrino y Nelly Rosa Caro Luján, profesoras-investigadoras de la institución, fue presentada en la Feria Internacional del Libro de las Universitarias y los Universitarios de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Arlette Covarrubias Feregrino explicó que el libro se planeó a partir de un análisis de patrones y factores, a la par del ofrecimiento de dar algunas soluciones que permitan ayudar a los jóvenes a transitar a la vida adulta de manera más sana, plena y con oportunidades de desarrollo.
Por su parte, Nelly Rosa Caro Luján dijo que el origen de toda la vulnerabilidad que se retrata en el libro está en la desigualdad, la pobreza, la violencia y la polarización social, las que se agudizaron con la pandemia.
La investigadora consideró que la transición a la adultez debe darse en términos menos desfavorables para las y los jóvenes, ya que es deber de la sociedad trabajar en acciones de apoyo a las juventudes, aun cuando los problemas vienen de generaciones atrás y desde el seno familiar.
«Lamentablemente, el resultado de estas transiciones de los jóvenes es la consolidación de las desigualdades que vienen desde los hogares y desde las familias», añadió al tiempo que insistió en la necesidad de políticas integrales e intersectoriales para atender estos desafíos.
Angélica Bautista López, profesora-investigadora de la UAM Iztapalapa, hizo los comentarios y dijo que la juventud se ha romantizado mucho, poniendo sobre los jóvenes muchas más responsabilidades de carácter social, pero en México, con los entornos precarios y las problemáticas sociales, forman un sector vulnerable en muchas dimensiones.
Detalló que el libro está dividido en tres secciones y nueve capítulos, en los que se presentan los diversos escenarios y situaciones de la vulnerabilidad de las y los jóvenes mexicanos, incluye 10 artículos, una introducción y un texto de conclusiones generales, escritos por más de 20 autores.