Entre 40 y 50 millones de pesos es la estimación de recursos que serían necesarios para la atención de los 12 espacios de la Universidad Autónoma del Estado de México que sufrieron daños después del sismo del 19 de septiembre, sin embargo el rector Alfredo Barrera Baca, reconoció que la Máxima Casa de estudios no cuenta con el presupuesto y harán una gestión con el Gobierno del Estado.
Para atender los daños que se registraron en 12 de los 139 espacios de la Universidad Autónoma del Estado de México, se necesitará un estimado de entre 40 y 50 millones de pesos según informó el rector Alfredo Barrera.
En entrevista señaló que entre estos daños se encuentran cuarteaduras, fisuras y fracturas en varios edificios de la Universidad, sin embargo reconoció que no cuentan con el suficiente recurso para atender estas afectaciones por lo que recurrirán a la autoridad estatal.
“No lo tenemos, vamos a gestionar ese recurso con las autoridades para ver en la medida en que nos pueden ayudar, pero lo más importante es que la UAEMéx reanudó sus actividades culturales, científicas, deportivas, académicas, plenamente” dijo.
Recordó que estas afectaciones se registraron en el Centro Universitario en Tenancingo Edificio A, el casco de la ex Hacienda de Santana que les donó el gobierno del estado y que es el edificio más antiguo y por tanto, el que sufrió mayores daños junto con el Plantel Pablo González y el edificio de Rectoría con daños en el torreón cuyas caras colindan con la calle Instituto Literario y Benito Juárez.
Barrera Baca comentó que todos los alumnos universitarios están en sus escuelas y el único caso donde se tuvo que improvisar algunos escenarios escolares fue en el Plantel Pablo González donde se instalaron 11 aulas provisionales en las áreas deportivas.
Finalmente y en cuanto al tema de las agresiones entre estudiantes de la UAEMéx y personal del estado mayor durante la visita del presidente Enrique Peña Nieto a la entidad mexiquense, el rector de la Máxima Casa de estudios reafirmó el exhortó a manifestarse y hacer uso de la libertad de expresión pero con pleno respeto a los demás, pues “la libertad no significa que todo está permitido” concluyó.
