Al menos 450 viviendas que resultaron afectadas por el sismo del pasado 19 de septiembre deberán ser destruidas pero además reconstruidas en espacios diferentes a los que tenían en su ubicación original, esto debido a que se encuentran dentro de zonas de riesgo y en las cuales no se dan las condiciones para poder construir espacios habitacionales.
Enrique Jacob Rocha, secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda en el Estado de México aseguró que se les estará apoyando con material de construcción además de asesoría para poder hacer una cimentación adecuada de estos espacios, sin embargo se estará revisando que no haya desarrollos habitacionales irregulares que pongan en riesgo a la población.
Especificó que gran parte de los problemas que se presentaron en las viviendas se debe a que fueron construidas con adobe y más tarde se fueron integrando algunos otros elementos como pisos e incluso segundos pisos lo que afectó la estructura original y permitió la caída de muros y en algunos casos las perdidas totales.
Específico que será a inicios de esta semana cuando sesionará el comité de apoyo integrado por la Sedatu y el gobierno del estado de la mano de el sector empresarial con lo que se determinarán zonas de riesgo y posibles espacios para su reubicación.
