Un equipo de arqueólogos egipcios ha descubierto una tumba faraónica, que contiene treinta momias y varios ataúdes de madera y de piedra, de hace aproximadamente 4.300 años ( 640 a .C.), en la localidad de Saqara, al suroeste de El Cairo.
El Consejo Supremo de Antigüedades anunció hoy que la tumba fue hallada en la zona de Gisr al Modir, al oeste de la pirámide escalonada, construida como tumba del faraón Zoser (2.650 años a.C) por el arquitecto y médico Imhotep.
La tumba, de piedra caliza, pertenece a un hombre religioso llamado Sengim, que vivió durante la VI dinastía del Imperio Antiguo (2575- 2150 a .C).
En Saqara, cuya área monumental cubre una extensión de siete kilómetros cuadrados, se ubicó la necrópolis de los primeros faraones, por lo que el recinto acoge las tumbas más antiguas de Egipto, entre ellas la pirámide escalonada del faraón Zoser.