Durante los últimos meses ha crecido de manera considerable el número de viviendas que son alquiladas como hospedaje turístico a través de aplicaciones como Airbnb, sin embargo no se tiene un piso parejo para la prestación del servicio.
Alejandro Díaz, presidente de la asociación de hoteles y moteles de Ixtapan de la Sal aseguró que estos servicios no tienen ningún tipo de reglamentación ni de obligaciones como lo hace un hotel, es decir sin inspecciones en protección civil, salubridad, de la Procuraduría del Consumidor y ni siquiera hacen el pago del 4.5% del impuesto al hospedaje.
Indicó que es fácil detectarlos, sólo en el caso de Ixtapan de la Sal son 70 viviendas las que se están alquilando para prestar este servicio contra 50 hoteles establecidos de manera tradicional y aunque lo preferible sería que hubiera una reglamentación desde el nivel federal también se pueden tomar medidas en lo local.
Precisó que no se niega que el avance de la tecnología podría ampliar este y otros servicios, por lo que no están en contra de que se ofrezca, pero sí de que se tengan condiciones igualitarias para la prestación del hospedaje de manera tradicional.
En el caso del sector hotelero y cumplimiento de una sola norma podría traer hasta cien puntos de revisión diferentes, mismos que no son aplicables a servicios de este tipo.
