El Consejo General del IEEM aprobó un presupuesto menor para 2023, en comparación con 2017, año en el que también hubo proceso para elegir la gubernatura del estado. El prespuesto global es de 2 mil 829 millones de pesos, 12 por ciento menos en 2017.
“El presupuesto debe formularse con base en la asignación de la anualidad anterior, y considerando la estimación financiera anual proyectada para cumplir las atribuciones institucionales, todo ello debe hacerse bajo estrictas medidas de austeridad, racionalidad, y disciplina presupuestal, es mi convicción que el proyecto de presupuesto 2023 que se trabajó en el instituto, cumple con estos elementos”, dijo la consejera presidente del IEEM, Amalia Pulido Gómez.
La reducción será de 12% según lo dio a conocer la consejera y, el total aprobado por unanimidad es de 2 mil 829 millones 173 mil 258.81 pesos, de los cuales mil 307 millones 541 mil 707.51 pesos corresponden al financiamiento público para el año 2023, que deberá ser entregado tanto a los partidos políticos, y de ser el caso a las candidaturas independientes que participen en la Elección de Gubernatura 2023.
Este presupuesto será enviado al Poder Ejecutivo para ser integrado al proyecto de presupuesto de 2023 que se remite a la Cámara de Diputados. Además, el Consejo determinó que estos presupuestos podrán ser ajustados por el Consejo General una vez que el Presupuesto de Egresos 2023 sea autorizado por la Legislatura local y se conozcan las variables para el cálculo del financiamiento público del año 2023.
“El primer rubro de gasto es el que corresponde a los derechos y prerrogativas previstas en el artículo 11 de la Constitución mexicana, así como en el 42 de nuestro Código Comicial; 46 centavos de cada peso se destinarán a este rubro”, explicó Pulido.
Detalló que en una institución que cuenta con personal altamente profesional y especializado, el 34 por ciento del presupuesto se destinará a servicios personales, mientras que el 14 por ciento de los recursos solicitados se destinarán a servicios generales, donde entran los arrendamientos de las sedes de los órganos desconcentrados, los servicios necesarios para la conservación y mantenimiento del patrimonio del Instituto, y los servicios cotidianos como agua, seguridad y luz.
Amalia Pulido adelantó que en breve pondrán a consideración alguna propuesta para reducir aún más estos costos.
