De acuerdo con la diputada Itzel Pérez Correa, la violencia vicaria, es un fenómeno que afecta no solo a las madres, sino también a las infancias y adolescencias, quienes, según la legisladora, han sido relegados en el debate público, de ahí, la importancia de visibilizar cómo este tipo de violencia impacta a los menores y la urgencia de generar políticas que protejan su integridad emocional y física.

Por ello, y para proteger la dignidad e integridad física, psicológica y moral de menores de edad quienes son utilizados para causar daño a las madres, presentó una iniciativa para incluir este tipo de conductas como causales para acabarse y suspenderse la patria potestad, contra la persona que cometa el delito.
«Al final de cuentas es un clamor de las madres que nuestros hijos estén con nosotras. Creo que no hay ningún lugar en el mundo que sea más seguro para los hijos y las hijas, los adolescentes eh que a lo mejor acerca de la madre, eh por supuesto con sus restricciones debidamente. Sin embargo, yo creo que es muy importante visualizar que necesitamos hablar del tema también.»
Correa subrayó que es fundamental poner en el centro del debate el impacto que tiene la violencia vicaria en los menores, quienes son utilizados como instrumentos para ejercer control y daño, y enfatizó que es necesario avanzar en medidas más contundentes, como la posibilidad de retirar la patria potestad a quienes ejercen violencia vicaria.
Esta iniciativa se dirigiría a padres en casos donde se violente de manera directa, también a los infantes o adolescentes y no sólo a la madre, al separarlos de ella, “¿Tú crees de una persona que los violenta que les hace tener emociones que no deberían de acuerdo a las etapas que están viviendo pudieran tener eh pudieran estar bien con esa las personas, yo creo que la verdad sí necesitamos quitarles.” Por lo que, los menores podrían decidir en el futuro si desean restablecer una relación con sus padres, pero insistió en que la prioridad debe ser protegerlos de entornos dañinos.
Finalmente, señaló la necesidad de realizar estudios psicológicos para comprender las afectaciones que sufren los menores expuestos a la violencia vicaria para entender las afectaciones y brindar apoyo integral a las víctimas. Además, de revisar otros factores, como el entorno familiar, para ayudar a las madres a enfrentar esta violencia.