Con la obligación de certificar a los operadores de motocicletas y del uso del casco de protección, la Secretaría de Movilidad en el Estado De México promoverá una reforma en materia vial con el objetivo de que las personas que incumplan estas normas puedan ser acreedoras de multas.

Daniel Sibaja, secretario de Movilidad del Estado de México, señaló que esta normativa ya se aplica en otras entidades y que es una necesidad urgente, ya que los accidentes en motocicleta se han convertido en una pandemia: todos los días en México ocurren 16 accidentes mortales. Por ello, el uso de cascos certificados será obligatorio.
Señaló que esto no es demasiado costoso, se pueden encontrar con características de alta calidad, hasta en 700 pesos y con esto ante un impacto, las posibilidades de sobrevivir de los operadores se elevan de manera considerable.
Un ejemplo es la ciudad de México, en donde hay una inspección estricta en los carriles en los cuales se puede circular, las velocidades, el número de ocupantes, así como el uso obligatorio del casco de seguridad, una situación que se hacen indispensable para garantizar la seguridad de quienes utilizan este medio de transporte, pero también del resto de los ciudadanos que utilizan algunos otros.
Señaló que esto no debe verse como un elemento de extorsión o corrupción, sino como una responsabilidad compartida y aun cuando no sea popular la medida es necesaria, además recordó que en la entidad hace ya cinco años que no se cobran multas.
“Recordar que no todos pagan multas si ustedes cumplen no lo tienen que pagar y es por seguridad”.
Falta de sanciones en municipios agrava inseguridad vial
A este ejercicio, además, dijo, se deben sumar los ayuntamientos, ya que en buena parte de ellos no están siendo aplicadas las infracciones de tránsito, una medida que aun cuando resulta popular entre la población, también genera temas de inseguridad y un incremento en los accidentes de tránsito.
La última cifra registrada indica que en México circulan actualmente más de 25 millones de motocicletas. La fábrica más grande del país, Italika, ubicada en el Estado de México, produce 1.5 millones de unidades al año.